Durante la Asamblea de socios celebrada en Úbeda-Baeza, y con motivo de la renovación de la Junta Directiva de la SECT, el quien hasta ese momento fuera su Presidente, el Dr. José Luís Martínez de Bourio Múgica, 
se despidió con unas emotivas palabras:
«Todo empieza y todo acaba». Es una pena pero es así, y más que con pena, me voy orgulloso y contento de haber sido presidente de esta Sociedad, algo que siempre me quedará. Mi máxima ha sido la unión, como decía Winston Churchill: «si estamos juntos no hay nada imposible. Si estamos divididos todo fallará».
Eso quise desde el primer día de mí mandato y, eso dejo en mí legado «juntos siempre, siempre, llegaremos más lejos». 
Hace 8 años me propusisteis y elegisteis ser vuestro presidente. Recuerdo con ilusión aquel momento. Se presentaba una etapa desafiante a la vez que llena de ilusión y optimismo. Y llegué en son de paz, como decía por la tolerancia el respeto y sobre todo, la unidad. No me oiréis decir otra premisa que la de siempre, siempre deberemos permanecer unidos. Unidos somos más fuertes. Unidos somos mejores.
Todos somos médicos, conocemos el sector, y todos sabemos de la importancia del colega, del compañero, del amigo a nuestro lado. Sabemos remar en equipo y, sin duda, durante los últimos 8 años lo hemos demostrado. Como apunte, durante este período, la Asociación ha sido premiada con una Torre Ercilla y, hemos sido reconocidos, entre otros galardones, como Ángeles de la Plaza. Veis, si remamos a una, llegamos más alto.
Hemos hecho lo más retador, pero queda lo más difícil que es mantenerse. Ahora que es época de fútbol, de finales, como se dice en el argot futbolístico, o en el económico, y en todos en general, lo difícil no es subir, sino mantenerse.
Presi, buen desafío te dejo, aunque estoy totalmente convencido que no sólo lo vas a lograr, sino que te vas a superar.
Por supuesto, aprovecho éstas mís últimas palabras como presidente, para pedir perdón. Perdón a quién no le haya servido, perdón por lo que haya podido decir que haya ofendido, perdón, en definitiva, a aquella persona que se haya sentido mal por alguno de mís actos. Si ha sido así, de verdad LO SIENTO.
Y pese a mís palabras de despedida, para nada esto es un adiós. Cierro una etapa como presidente, pero estoy y estaré siempre a vuestro lado y a disposición de esta Sociedad que, pese a que suene a tópico y a canción, me ha dado tanto. Contar conmigo hoy y siempre, porque seguiré dando la lata… Os lo aseguro.
Empezaba mencionando a Winston Churcill, un líder nato, y me gustaría terminar con un colega, conocido por todos, – Gregorio Marañón – que decía «No sabrás todo lo que valgo hasta que no pueda ser junto a ti todo lo que soy».
Queda dicho, llegué con el propósito de estar unidos, y unidos hoy aquí os digo, no adiós, que suena triste y melancólico, sino hasta luego o mejor !HASTA LA PRÓXIMA!
José Luís Martínez de Bourio Múgica